6 consejos de salud mental que cambiarán tus días (para mejor).
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A veces, mantener una buena salud mental parece más complicado de lo que realmente es. No se trata de hacer grandes cambios, sino de pequeños ajustes en tu forma de pensar y de actuar que, con el tiempo, pueden marcar una gran diferencia. Aquí te comparto 6 consejos sencillos para mejorar tu bienestar emocional y hacer que cada día cuente.
1. Si todavía te molesta después de 24 horas, dilo, pero no dejes que pasen más de 48 horas.
¿Te ha pasado que algo te molesta y, sin darte cuenta, terminas reaccionando sin pensar? Cuando algo te afecte, respira y dale un día para reflexionar. Muchas veces, las emociones intensas se calman con un poco de tiempo, y lo que parecía un gran problema se vuelve más pequeño. Sin embargo, si después de 24 horas sigue molestándote, exprésalo, pero no dejes que pasen más de 48 horas. Este equilibrio te permite evitar que los problemas se acumulen o se vuelvan más grandes de lo que son. Recuerda: reflexiona antes de actuar, pero resuelve a tiempo para mantener relaciones saludables y una mente en paz.
2. Trátate a ti mismo como a alguien a quien quieres.
Piensa en alguien a quien amas profundamente. ¿Cómo lo cuidas? ¿Cómo lo tratas cuando tiene un mal día? Ahora, imagina aplicar ese mismo amor, cuidado y comprensión hacia ti mismo. Frecuentemente, somos muy duros con nosotros mismos, más de lo que seríamos con los demás. Empieza a cuidar de ti mismo con el mismo cariño con el que cuidarías a un ser querido. Haz de tu bienestar una prioridad y toma decisiones que te hagan sentir bien, que te acerquen a la felicidad y al equilibrio que deseas. Cuando te tratas con amor y respeto, mejoras tu relación contigo mismo y, por tanto, tu bienestar emocional.
3. Un mal día no define toda tu vida.
Es fácil caer en la trampa de pensar que un día malo significa una mala vida. Pero la verdad es que todos tenemos días difíciles, momentos de duda y situaciones que parecen fuera de nuestro control. Sin embargo, un mal día es solo eso: un día. No tiene el poder de definir toda tu vida ni de borrar todo lo bueno que tienes. Recuerda que eres mucho más que un mal momento; eres la suma de todas tus experiencias, sueños y logros. Cuando un día se ponga cuesta arriba, recuérdate que mañana será una nueva oportunidad para volver a intentarlo, para hacer las cosas de manera diferente, y que siempre tienes el poder de cambiar tu historia.
4. Pregúntate: ¿importará esto dentro de un mes?
A veces, nos ahogamos en un vaso de agua por cosas que, con el tiempo, se vuelven irrelevantes. Cuando algo te cause preocupación o estrés, pregúntate: “¿Esto seguirá importándome dentro de un mes?”. Si la respuesta es no, quizás no valga la pena preocuparse tanto. Mantener las cosas en perspectiva te ayudará a centrarte en lo que de verdad es importante a largo plazo, a dejar ir lo que no necesitas y a ahorrar energía para las cosas que realmente merecen tu atención.
5. ¿Enfadado, ansioso, preocupado? Piensa en las cosas por las que estás agradecido.
Las emociones negativas como la ansiedad, el enfado o la preocupación pueden consumirnos si las dejamos. Cuando te sientas atrapado en esos sentimientos, intenta un cambio de enfoque: piensa en las cosas por las que estás agradecido. Hacer una pausa para reflexionar sobre lo bueno que tienes puede ser una herramienta poderosa para cambiar tu estado de ánimo. Además, si lo haces mientras te mueves —como dando un paseo—, los beneficios son aún mayores. Sal, respira aire fresco y deja que tus pensamientos fluyan. Es asombroso cómo la gratitud, combinada con el movimiento, puede transformar tu perspectiva.
6. Preocuparse demasiado y quejarse no ayuda.
Preocuparse es parte de ser humano, pero preocuparse en exceso o quejarse constantemente solo te agota emocionalmente. La preocupación no cambia nada; solo te roba energía y tiempo. En vez de enfocarte en lo que está mal, concéntrate en lo que puedes hacer para mejorar la situación. Si hay algo fuera de tu control, aprende a soltarlo. Usa tu energía para buscar soluciones, para cuidarte y para disfrutar de las cosas que realmente importan. La vida es demasiado corta para perderla preocupándote por cosas que, al final del día, no puedes cambiar.
¿Te cuesta mantener presentes estos consejos a diario?
A veces, puede ser difícil recordar estos principios y aplicarlos en tu día a día. Para ayudarte a hacerlo, hemos creado el Diario Chowa. Este diario está diseñado para ser tu compañero de viaje, guiándote cada día para que te enfoques en lo que realmente es importante para ti, te hace reflexionar y te ayuda a conocerte mejor.